Dicen que los momentos de crisis es buena epoca para re-inventarse,
y alguien de arriba me pone una gran prueba,
tal vez no sea tan descabellado iniciar nueva ruta,
no estaba tan equivocado cuando tiempo atrás me cuestionaba,
que si vamos llegando a la primera cumbre,
es momento de parar y ver hacia donde seguimos,
y ese tiempo ya llegó...
Sanar heridas del corazón, y ya sin trabajo,
de ligero equipaje, pensando cambiar de escenario,
despido al guionista de mi vida,
y de puño escribo nuevas aventuras...
Vamos por el segundo tiempo del partido,
la vida me esta dando paliza en goles,
pero bien digno jugaré estos segundo 45 minutos,
y vemos si hay alargue, a seguir mojando la camiseta...
Y ya para termina adiós Dulcinea,
este caballero de armadura de lata y de miles de sueños,
se retira y ya no te verá crecer...
Adiós...
Carlos...