lunes, 31 de mayo de 2010

cuerto corto...


realmente no sabia como sucedió, solo que de repente su cerebro estaba sobre el teclado, sus dedos continuaban tecleando, enviando frases cortas, algunas sin sentido, su vista seguía fija en el monitor, la escena no era extraña, a excepción que el sujeto sin decir palabras y además sin el cerebro en su lugar continuaba viendo imágenes, leyendo mensajes cortos, de cuando aquel  "amigo" esta de cumpleaños, o realizando tests sin sentido, de tal modo ante todo ese bombardeo de información irrelevante, su cerebro deserto, hasta un nuevo termino de sesión...