martes, 15 de enero de 2019

Desierto

Cuando tiempo ha pasado desde la ultima vez que vi gente, cuando tiempo ha pasado que he visto gente viva, el desierto cada vez derrite mi cerebro, el calor es agobiante, agua tan poca queda, y no veo al horizonte nada de civilización cerca, aunque ante la gran explosión, y el posterior haz de luz en el cielo, todo cambio, de partida mi celular dejo de funcionar, y no es tan solo que perdiera señal, sino que la batería de golpe se agoto.

Camino sin rumbo fijo, las semanas que he pasado en el desierto han sido eternas, he comido de todo, desde insectos, hasta algunas flores de cactus, no niego que algunos cactus me han provocado efecto alucinógenos, quiero pensar que son por los cactus, y no debido a algún tipo de radiación que fui expuesto por el haz de luz, en que momento creí que seria bueno salir a realizar trekkingr un domingo temprano por la mañana, aunque pensándolo bien fue para mejor ya de la ciudad no veo nada. Espero que he equivocado el rumbo, y estoy caminando en sentido contrario, no quiero ni pensar que la ciudad desapareció.

Ahora, tan solo debo seguir un rumbo fijo, esperando encontrar en primer lugar agua, y poder contactarme con mis seres queridos, saber que sucedió esa mañana de domingo, a que se debió esa explosión y el posterior haz de luz, tan solo con una botella con agua, espero llegar a buen puerto...


會繼續...




7 comentarios:

  1. Has llegado a buen puerto, has llegado a tu blog y estás entre amigos, te ofrezco agua fresquita.
    Un relato inquietante y atrayente. Abrazos Carlos

    ResponderEliminar
  2. No se que te ha pasado pero lo bueno es que estas de vuelta,cariños.

    ResponderEliminar
  3. Es verdad? Acaso cuentas algo que te pasó en momentos en que estabas trabajando en el Norte? Bueno...si no es así en un principio me lo he creído.
    Saludos Carlos

    ResponderEliminar
  4. Una situación muy dura en ese desierto, sólo, sin poderse comunicar con nadie, bajo el ardiente sol y faltando el agua.....espero que sea tan sólo un relato.Saludos cordiales

    ResponderEliminar
  5. No sé, Carlos, cuánto de ficción y cuánto de realidad hay en tu historia, pero tratándose de una incursión por el desierto de nuestro norte, no me extrañaría que fuese una incursión voluntaria a todo evento.Saludos.

    ResponderEliminar